Erase una vez dos zorros que caminaban por el parque alegremente, cuando se encontraron una seta gigante.
- Ostias, tio! - dijo uno. - ¿No sera alucinógena, no?
- No se, compi- contestó el otro. - Pegale un bocao y si la palmas es que es venenosa.
El zorro curioso se acerco a la seta y la chupo. Segundos despues, salio un nomo de detras de la seta con un bong y dijo:
- Eh, zorro! No chupes la seta que me la babeas tio!
Uno de los zorros le pregunto:
- Y tu, ¿quien demonios eres?
- Yo soy Rodrigo Cifuentes Pernal, pero la gente me llama el Lujuria. ¿Quereis drogaros?
- No se - dijo un zorro - ¿Eso es malo?
- Que va, compi. Toma, fuma.
El zorro agarro el bong y olio el humo que salia del tubito, y le pego una fueeeerte calada. Cuando solto el humo, el zorro empezo a toser mientras el nomo se descojonaba en el suelo.
El otro zorro cogio el bong y le pego una calada de pelao, tan fuerte que salia fuego de la cazoleta, y PAM!, cañon de humo pa la garganta. El zorro estuvo tres minutos tosiendo y cuando acabo dijo:
- Tio, ¡esta mierda es buenisima!
- Me caeis bien, estupidos zorros - dijo el nomo. -Por eso os voy a dar un trozillo de mi seta, pero pequeño que si no flipareis en colores.
El nomo saco un baldeo y corto tres trozillos de la seta y le dio uno a cada zorro y otro pa el.
- Venios, os invito a mi choza a drogarnos - dijo el nomo.
Se fueron pa la choza y se sentaron en el sofa. La casa olia a yerbabuena. Se tomaron el trozillo y esperaron.
- Oye, como os llamais? -pregunto el nomo.
- Yo Rogelio Pascual- contesto un zorro.
- Yo Anacleto Pons - respondio el otro.
- Oye, Lujuria - dijo Rogelio - esto no sube.
- Newbie... Esperate y veras.
Se quedaron sentados mirando la tele.
De repente Rogelio empezo a ver como si la pared tuviera boca y ojos. De golpe, le salio a la pared una cara sonriente que le decia a Rogelio: "poseeme, tomame, hazme tuya Rogelio".
Rogelio llevaba años sin mojar el churro y le entro un calenton. Se levanto y la metio en el primer agujero que vio, que resulto ser un enchufe y le pego un chispazo del copon.
A todo esto, los otros dos se reian y lloraban de la risa.
Cuando Anacleto abrio los ojos vio que de la cocina venia una sandia con unas gafas de sol y una chupa de cuero. Se le acercoy le dijo: "oshe, xavá, kiere grifa o ke? veintisinco gramos 60 eypos, testá bien o ke?". Anacleto flipaba, y en eso que apareció un platano y empezo a decir: "aaaaay er papa, ke te dixo ke no te ponga a vendé aki ke nos enmarronan y nos embargan la fragoneta". Y en eso que aparecieron un monton de malacatones con porras, cascos y escudos de antidisturbios y del otro lao unos limones anarkistas que se estaban cargando la casa y liandose a tortas. Se armo la de Dios y pillo a Anacleto de por medio. Los malacatones le pegaban con las porras, la sandia y el platano le kitaron el reloj y la visa y los limones le prendian fuego en el capullo. Empezo a correr de un lao a otro y el nomo mientras tanto se reia.
A lo ke el nomo empezo a ver como por la puerta entraba la pasma vestidos con trajes de bailarina y pistolas de agua, y el se reia, pero lo que no sabia era que se trataba de la pasma de verdad, solo que los veia diferentes. Y se los llevaron pal trullo y aun estan colocados los tres, y se rien que te cagas. Pero ya se han quedado lujuria los tres para siempre.
Moraleja:
si vas a ensetarte, vigila que haya alguien sobrio para controlarte.