Aquel verano,necesitaba,un merecido descanso;así que tome la decisión y me dispuse a comprar el billete del tren,destino Blanes.Mí maleta era todo mi equipaje, no necesitaba más,solo descansar;y me subí al vagon del tren,era bastante nuevo,por cierto,tenía un aspecto limpio y iva casí vació, me sente con toda comodidad, hasta mí destinó.Poco a poco se fue llenando, en los andenes consecutivos,subian pasajeros en casi todos los apeaderos.Los jovenes,chicos y chicas adolescentes, ivan cargados con los bultos,el transistor a tope,las madres con sus hijos, algún que otro anciano leía el periodico, hacían mucho bullicio ocuparon poco a poco todos los asientos del vagon.Unos leían,otros escuchaban musica con los auriculares, se comían un bocadillo,hablaban a gritos, al final vino el revisor y aumentó más el vocerió de la gente.El altavoz iva nombrando con voz con voz femenina las estaciones siguientes y la dirección que tomaba el tren.

AL bajar del tren, junto a la estación, el autobus de linea, esperaba a los pasajeros del tren, para efectuar el recorrído por el pueblo, hasta la playa misma de Blanes.Despúes de de jar el equipaje, solo una pequeña maleta que llevaba, en el hotel me dirigi sín perder tiempo más tiempo, ala playa a darme un buen chapuzón,el sol me cegaba los ojos y me puse mis gafas nuevas de sol,hacía un día precioso porque el sol estaba muy bajo en el cielo, era ya el mediodía.Cruce el paseo marítimo,caminando por la playa y la brisa me mecía mi larga melena de rizos, mís pisadas en la arena dejaban mís huellas en la arena y yo aliviada me dispuse a tomar un baño me zambullí una y otra vez hasta cansarme y quedarme tendida en la arena.Era tal el cansancio y estres acumulado en mí que no tarde en quedarne dormida.
Se veían unas pequeñas embarcaciones allá a lo lejos y las gaviotas,esos pájaros costeros,volaban y revoloteaban, descenciendo sobre el agua para poder pescar , con su largo pico, algo de aliménto.
El sol me quemaba la cara, yo seguía dormida y empeze a soñar a imaginar o no se que fué lo que paso que entre sueños pense que estaba despierta y de pronto, el sol se oscureció,como en una noche de terror, la angustia me ahogaba en la garganta seca y aspera, las gaviotas revoloteaban haciendo circulos a mi alrededor,parecían mostruos blancos,con sus garras fieras malignas y me daban de picotazos sin parar.No pude contenerme más y di un grito desgarrador,fue tal el espanto que me levante de un salto y me puse en pie,las rodillas me temblaban y un sudor frio empapaba todo mi cuerpo,recogi mis cosas y sin entretenerme más me fui por donde había venido,rapido hacía el hotel .Aquellas merecidas vacaciones han empezado mal pense ,pero aún quedaban muchos días y procure olvidarlo,encendi el televisor
i me quede dormida mirando la novela de la sobremesa, pero.esta vez.dormi placidamente.Había acabado todo ,parecía una maldición.ahora empezaban las vacaciones de verdad.