La soledad,te hará sentir angustia y desearás recibir la visita de recuerdos amados,entonces sentirás que alguien llega y se tiende a tu lado,sentirás amor cuando besos cubran tu cuerpo y las caricias te lleven a lugares desconocidos,únicos,especiales.No sentirás frío,sabrás de mis viajes por la vida,.de mis andares,seremos uno,en medio de la noche silenciosa.Cuando el aurora arribe,los últimos besos serán en tus pechos,ya de pie miraremos las huellas de nuestros cuerpos,en la hierba,en la arena,en tu cama,en todos los lugares donde te llamé,mujer.
n día no vendré más,y sabrás que ya no puedes ir con los hombre comunes,toscos y sabrás que cambiarias todo por tenderte a mi lado en la hierba y escuchar los ruidos de la noche.Tu quieres un amor diferente,como este,que te hace sentir reina de mis dominios,sin tocarte.
¿Qué dónde iré?búscame,en los rostros de niños vagos,con hambre y frío,búscame a la hora de salida de las Escuela,cuando las risas infantiles se visten de libertad,en el amor,en el amor del mar por la playa,donde rompen las olas,en la germinación interminable de la vida.Estaré entonces contigo mujer,a tu mundo lejano llevo flores hermosas,te digo que todo sale sobrando,cuando me miro en tus ojos quietos
M everás,en la silueta del vagabundo que lleva un perro de raza indefinida,con donaire.
Mientras,cuando amanece y no estás,cuando te busco sin hallarte hasta que viene el dia,siento que los fantasmas me saludan,trayendo su mensaje de vida y muerte,reuno fuerzas para volver a decirte,que muero cadia dia lejos de ti,que por tu ausencia,la pena y la tristeza,implulsan mi barca negra,con banderas negras,tripulada solo por un marino de mirada ausente,que todo me lleva amada,con mucha fuerza,que ya no quiero defenderme y camino como condenado a morir,sin ganas,solo,a abrazarme con la muerte
Antuan Rommel Agosto 2005