Esta historia se remonta en los siglos 50 del siglo pasado en una vieja casa de esta época, era una casa muy adecuada a esa época en que se vivía, una casa de bastante dinero para mi gusto.
Esta casa llamaba mi atención cada vez que pasaba por ahí, por una simples ganas de entrar para conocer esa llamativa mansión se podría llamar de ese modo.
Un dia en esa casa donde parecía vivir mucha gente no vivía absolutamente nadie me di cuenta tan solo por estar un año yendo casi todas las tardes para ver si había alguien.
Después de estar segura de que allí no habitaba nadie me anime a entrar no se como se me ocurrió tomar un simple alambre que era como tomar una galleta de agua era obvio que nunca iba abrir esa maldita puerta con aquel alambre.
La cuestión es que tuve la idea de tomar las llaves del auto de mi papa y así poder abrir esa maldita puerta.
No me van a poder creer pero saben ¿qué? . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . pude abrir esa puerta y entre a la casa. La verdad es que a simple vista no había absolutamente nada interesante para observar. Pero la cuestión es que cuando empece a entrar a la casa un poco mas fui descubriendo misteriosos olores que parecían de muertos. Entonces empece a recorrer intensamente cada rincón de la casa. Hasta que descubrí en el horno de la cocina un gato desgollado. Me dio tanto miedo que salí corriendo de allí. Ya sé que era nada más que un animal pero yo soy muy sensible a los animales. La cosa es que empece a averiguar por que habían matado a aquel gato y me entere que era por que hacían exorcismos, el exorcismo es una brujería podría llamarse así por que por medio de animales y objetos como muñecos pueden hacerle daño a otra persona.
Y también medí cuenta de que no habitaba nadie por el solo hecho de ser descubiertas por un oficial de policías. Pero lo que hacían era ir todas las noches cuando nadie las veía.
Pero era obvio que yo no me iba quedar de brazos cruzados. Así que fui a la comisaria cerca de mi casa y conté todo, y pedí que allanaran la casa, ellos fueron pero según ellos no encontraron nada. A pero esto no iba a quedar así. A la tarde volví a entrar a la casa para quedarme hasta la noche.
Cuando ellas llegaran para hacer esas brujerías yo iba a estar detrás de la puerta bien escondida y podría filmarlas para que el oficial me creyera.
Eran dos mujeres de aspectos muy extraños, usaban vestidos largos, rotos y sucios, sus cabellos eran largos y abultados, tenían ojos grandes y desconcertantes, de baja estatura, una era flaca y joven y la otra era gorda y vieja.
Se sentaron en dos banquillos que había alrededor de la sala y empezaron a sacar objetos como muñecos y un ratón. A la muñeca le sacaron los dos ojos y le clavaron una aguja en medio del pecho y la tiraron al medio de la estufa que había en esa sala y al ratón empezaron por arrancarle la cola y córtala en pedazos para meterla en una bolsa luego tomaron un cuchillo que parecía bien filoso y al pobre animal lo cortaron al medio y lo metieron en esa misma bolsa donde metieron la cola cortada en pedazos. Todo esto lo filme.
Lo que hice fue llevar la filmación a la policía cuando lleve la película enseguida la pusieron y nadie podía creer lo que estaban viendo y me pidieron disculpas por no creerme.
Gracias a dios las exorcistas quedaron presas y nunca mas saldrían para hacerle mal a nadie.
Estas exorcistas con estas brujerías desde otro lugar mataron a los dueños de esa casa a la que yo entre para quedarse con todo lo de allí dentro y poder seguir haciendo brujerías. Espero que les allá gustado esta historia