(quiero dejar claro que este cuento esta absolutamente escrito y pensado por mi y esta hecho para que lo lea quien quiera y para que disfruten leyendolo y quiero que sepais que aunque este en primera persona no es una historia real y todos los personajes son imaginarios)
Era ya el mes de junio y acababa de cumplir 25 años. a mis 25 años todavia no había tenido ninguna relación estable con una chica. téngo el pelo corto y un pelín rubio, cejas espesas y ligeramente arqueadas. Estaba delgado pero no tanto como para notarseme mucho los huesos. Era alto y lo siguo siendo. siempre me gusta ir con chandal aunque no por eso voy desarreglado, siempre me gusta ir bien vestido y a la vez comodo. Nunca se me dio bien estudiar. Al final acabe aceptando trabajos basura con los que no tenia apenas para comer. Mis padres murieron hace tiempo y yo estaba muy solo. al final a los 20 años descubri mis dotes de escritor y publique unas cuantas novelas de misterio y detectives y vendí muchas copias de todas.
bueno empecemos con la historia. Volvia yo de recoger un cheque, fruto de mi ultima obra, y caminaba a las 12 de la noche por las oscuras calles cuando me tope con una chica. Por extraño que pareciera al verla me pareció una diosa. tendria unos 20 años o así y tenía unos cabellos rubios deslumbrantes que le caían por la espalda hasta un poco mas abajo de los hombrossus ojos eran verdes igual que los mios y su boca era la mas sensual que había visto. su cuerpo tenia unas formas perfectamente delimitadas y tenia unas piernas muy femeninas. Nada más verla me enamoré. Le pedí perdón por ser tan patoso y ella se disculpo tambien y me dijo:
- ¿sabes por donde esta el hotel marabunto?
- si, ¿te acompaño?
- vale
La acompañe hasta el hotel sin dejar de mirarla.
-Me llamo Elisa-me dijo.
-yo javi
Me pico la curiosidad y le pregunte si se hospedaba en el hotel y dijo que por unos días solamente. Estaba hospedada con su padre por cuestiones de trabajo.
Llevabamos 15 minutos andando y por fin vimos el hotel. No era dificil encontrarlo con lo grande que era.
Al llegar vimos un monton de gente viendo algo en una esquina del edificio y una ambulancia al lado. Dos medicos se abrieron paso y aunque no veía nada les oi decir:
-esta muerto
nos acercamos más y pudimos ver un hombre con la cara ensangrentada que parecia ya entrado en años. El estado en que se encontrabaera horroroso. Había caido de alguna ventana.
En tres segundos pense todo eso y cual fue mi sorpresa cuando Elisa murmuro:
- Dios mio es mi padre!