este relato no es propiamente largo: es mas bien una descripcion de como vive la gente en un barrio populoso y demasiado alejado de las grandes colonias populares. omito el nombre del barrio porque hay muchos asi. la protagonista de dicho relato es una mujer mestiza, morena, baja de estatura y con cierto cutis aun fresco de mujer joven. su nombre, pongamosle Adriana Martinez Ceja, de unos 31 años. ella tiene una estetica amplia y regular pero de buen estilo, unisex. le llaman: " stetica adry". por ella, que se llama adriana. un local repintado de rosa mexicano con azul: el letrero en letras rojas para resaltar. esta al cruzar el eje central de la localidad. el local no es muy frecuentado pero le da para comer a ella y su hijita Luisa, de 2 años. la cual prefiere que no este en la escena porque cuando esta la niña le provoca muchos atolladeros con sus travesuras e inquietudes de niña pequeña. la niña la deja encargada una vez que sale para abrir el local a las 8 am. en punto con unas vecinas o bien, con su prima Micaela que es una mujer joven dos años menor que ella. mientras mira la tv. en un canal muy visto por amas de casa y de comadreo vespertino su cara refleja un aburrimiento al vacio. ". no se para que me afano en abrir temprano. - piensa-. si siempre termino cerrando hasta despues y eso, con dos o 6 clientes." sabe que no es una profesion muy llevadera pero que se le puede hacer. ella, que saliendo de tercer año de secundaria no alcanzo lugar en la media superior: ya le habia dicho adios a su futuro como profesionista en odontologia. por ordenes de su madre, quien ahora ya no le apretaba las cuerdas como en ese tiempo: mas tambien por recomendaciones de sus hermanas mayores, emma y rosaura habia entrado a estudiar por tres años en un instituto de belleza. era en ese entonces una joven vivaz y aventada de unos 23 años. habia conocido al hombre de su vida cuando habia cumplido los 27. pero no veia desde donde comenzaba ya su vida como mujer y donde su madurez. su marido, joven tambien de 29 años llamado Jose Juan orduño se dedica a estacionar autos en un valet parking propiedad de un restaurante donde sirven comidas etnicas del sur de la republica mexicana. apenas leprocura como mujer: cada quincena, da a ella para sus gastos diarios o bien, para los cuidados escolares y pediatricos de luisa: para la comida de los tres. en fin, no se le puede pedir mas. en eso, llega una señora algo mayor que quiere un permanente. le pide sentarse y empieza su labor. corta, arregla, corta, arregla. en fin, lo que hace en todo el dia. cuando pide a la mujer descansar del tratamiento estetico, ella se sienta y ve la tv: una actriz esta siendo entrevistada por este u otro proyecto que no es de su vida propia en ella, pero que lo menos la saca del tedio total. acaba la labor, le paga la mujer y se va. pasaran otros segundos, horas para que llegue otro cliente. hace 4 horas antes de la llegada de esta clienta ya habian venido unas 3 personas en la tarde. bosteza, y toma un refresco ligero que compra antes de abrir: vale la pena el esfuerzo. pasan otros 60 segundos y ella pegada la vista aun a la tv y la calle. luego, comienza a sentir calor. aunque ya son casi las siete y media de la noche sus prendas de percal que no son ajustadas porque ya no es ninguna joven le causan algo de calor y sopor. entra al baño improvisado del local y se quita la blusa color vainilla que a veces utiliza de sueter. mira su busto moreno: aun la firmeza sigue en sus formas y su piel no se ha decolorado. reconoce que no es gorda y que aun no ha perdido la lozania y frescura que su marido antes, siendo novios tipo peor es nada le tocaba, lamia, y halagaba; rociaba con su sudor taurino. rie un poco y prosigue a cambiarse de prenda. cuando regresa a su lugar de trabajo: la silla de peluqueria y los objetos, habla a las encargadas de luisa para saber como esta la niña. apenas le responden:

- ah! buenas noches, adriana: ¿ que como esta tu chiquita? bien, anda de alla pa¨ca: hoy no tuve tantos quehaceres y aqui esta con nosotras.

- ah. que bueno.- dice adriana-. y, ¿ ya comio? es que ora se me paso porque sali a abrir rapido y nomas le compre un gansito con un sandwich. ya ves que se pone melindrosita cuando no come en el dia.

- si, mujer. ya comio hace 6 horas. no te apures por tu criatura. por cierto, mujer: ¿a que hora cierras la estetica? ves luego que tu marido se hace el sordo y no te ayuda.

- no se, Cleta: unas veces llegan clientes, otras tengo citas a domicilio. tal vez me desocupe para cerrar en cosa de dos horas. cerrare a las 9:15 pm. asi me da tiempo pa¨ una ducha en mi casa, regresar por la niña y lavar mis instrumentos. no te apures.

- bueno, adriana: te espero. ya ves que luisa se pone re te impaciente cuando no te ve. ya me tengo que salir de la linea, me habla mi suegra que vino hace dos dias. ah! bueno. te hablo luego. a proposito, se me olvidaba decirte que.- y asi pasanlargo rato pasando a otros asuntos de muejres: la vecina de 11 anda con fulano, la otra se tiño el pelo, la novela d elas seis se va a cambiar de horario, el vecino de enfrente es guapo, bla, bla, bla. cuando al fin dice su vecina en turno que cuida de su hija-. ciao, adriana. te veo luego.

- ciao.- cuelga lentamente el telefono. esa llamada le ha ayudado a desbaratar la aburricion y la incertidumbre que tiene con su hija. amigas le sobran. en eso, recuerda algo: luisa debe acudir mañana con el pediatra para que la pese y le aplique las vacunas que le faltan. "carajo!-. piensa con rabia-. entonces no abrire mañana". arroja con leve enojo unas tijeras en la charola de los objetos. pero despues su cara se ilumina cuando piensa en algo mas positivo: "bah! quizas por un dia no pase nada. al cabo que a mi marido le pagan mañana la quincena." esboza una leve sonrisa y atiende a una chica que acaba de entrar para un corte de cabello. ella hace lo mismo que con la mujer mayor. asi es todos los dias. asi pasa la vida de una esteticista joven: que no sabe si quedarse entre el albedrio y el amor, o seguir la vida de una mujer que comienza la treintena. fin.